El 57% de las organizaciones en España sufrió al menos un ataque de este tipo durante 2021. La tasa de éxito del smishing es probablemente más alta que la del phishing en general, aunque el volumen de los ataques por correo electrónico sigue siendo mucho mayor, según Proofpoint.
Las organizaciones se enfrentarán a más ciberamenazas desconocidas dirigidas a sistemas locales, infraestructuras en la nube y aplicaciones SaaS. Estas utilizarán la automatización para recuperarse de los ataques de ransomware, y se centrarán en la detección precoz y la respuesta sólida.
En España, en torno al 30% del total de reclamaciones registradas por AEPD hacían referencia a la desatención de alguno de los derechos previstos en la normativa de protección de datos, y un 7% de esas reclamaciones se vinculan con el derecho al olvido en buscadores.
2022 ha estado marcado por problemas en las cadenas de suministro en operaciones, no sólo de ciberespionaje, sino también destructivas y de manipulación. Inetum apuesta por la colaboración público privada para mejorar la ciberseguridad de las organizaciones.
El número de ciertos tipos de amenazas también aumentó, como el ransomware, que registró una subida del 181%. Windows acaparó el 85% del total. En total, los sistemas de Kaspersky detectaron aproximadamente 122 millones archivos maliciosos en 2022, 6 millones más que el año anterior.
El 29% de quienes tienen formación son conscientes de haber recibido algún ciberataque, mientras que esta cifra desciende hasta el 11% en aquellos que no la reciben. Las medidas de seguridad que llevan a cabo los empleados en sus dispositivos personales de trabajo se relajan respecto a 2021.
Un elevado porcentaje de empresas reconocen que les resulta imposible hacer frente al actual panorama de amenazas, tarea que se ha complicado con la adopción del trabajo híbrido. El 80% de las empresas está dirigiendo sus esfuerzos en seguridad hacia soluciones Zero Trust para revertir la situación.