A lo largo de este año viviremos olas de ataques sin precedentes, usando todos los vectores de ataque. El Brexit, las elecciones de Estados Unidos y la guerra comercial dispararán la ingeniería social y el phishing. Persistirá una falta de personal experimentado y cualificado de seguridad.
La mayoría de las transacciones móviles fraudulentas provienen de malware publicitario. Se detectaron 98.000 aplicaciones maliciosas en Android y 43 millones de dispositivos infectados en 20 países. Se calcula que el 32% de las apps maliciosas más activas siguen disponibles en Google Play.
Esta campaña en japonés utiliza emails robados de cuentas anteriormente comprometidas como una plantilla para intentar infectar a los destinatarios. Se espera ver más tráfico de correo electrónico malicioso basado en el coronavirus en otros idiomas.
Microsoft o Amazon han sido afectadas por estos delitos de fraude, en los que delincuentes utilizaban el teléfono e información extraída de Internet para inducir a los usuarios a proporcionar datos personales. Es importante que el consumidor verifique la autenticidad de la llamada.
El malware se especializa en la instalación de programas de adware que molestan a los usuarios con anuncios ilícitos, interceptan las consultas del navegador de los usuarios, y modifican los resultados de búsqueda para distribuir más adware. Acapara el 30% del malware para macOS.
Los usuarios no son conscientes de lo vulnerables que pueden ser sus datos personales. No bajar la guardia con las contraseñas, no pinchar enlaces recibidos por email, proteger el móvil de las cargas USB y desconfíar de las redes WiFi públicas, son algunos consejos para asegurar los datos.