Los investigadores de Check Point han encontrado una vulnerabilidad crítica en Instagram. Se trata de un fallo en el tratamiento de imágenes de la red social que permite espiar a millones de usuarios de todo el mundo. Una vez notificado a Facebook, ya se ha subsanado y ha lanzado un parche.
Se está percibiendo una tendencia hacia la explotación de vulnerabilidades más específicas en lugar de otras más abstractas. Los fallos de software que más han crecido son aquellos relacionados con la autenticación y la autorización, pertenecientes a áreas más difíciles de analizar.