Las empresas deben unirse para proteger las identidades digitales de los usuarios

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Demasiados enfoques existentes para la gestión de identidad y datos ofrecen experiencias inadecuadas para los consumidores, los dejan vulnerables al robo de identidad y al fraude, y los ponen en riesgo de abuso. La falta de confianza les cuesta a las empresas 2,5 billones de dólares al año.

Según SalesForce, la necesidad de garantizar la protección de las identidades digitales está creciendo: alrededor del 57% de los clientes dicen que no se sienten cómodos con la forma en que las empresas manejan sus datos. Los usuarios digitales esperan experiencias personalizadas y convenientes, pero también quieren que los productos y servicios se entreguen de manera confiable y segura.

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Demasiados enfoques existentes para la gestión de identidad y datos ofrecen experiencias inadecuadas para los consumidores, los dejan vulnerables al robo de identidad y al fraude, y los ponen en riesgo de sufrir abuso. Se estima que el coste de la autenticación de identidad y la reparación del fraude alcance los 28.000 millones de dólares para 2023, según Boston Consulting Group.

Puede haber altos costos para las empresas que no actúan. Por ejemplo, la falta de confianza les cuesta a las empresas 2,5 billones de dólares al año. Las estimaciones muestran que, a medida que cada empresa desarrolla su propio enfoque por separado, se estima que las empresas están perdiendo hasta un 30% de ingresos potenciales.

Mientras tanto, los esfuerzos de colaboración muestran cómo los sistemas de identidad digital confiables pueden conducir a una mayor confianza del usuario. Por ejemplo, las identidades digitales colaborativas dirigidas por bancos podrían ayudar a reducir los 60 millones gastados en verificación de clientes a nivel mundial cada año. En la industria sanitaria, el intercambio continuo y seguro de información médica entre organizaciones puede ahorrar el 50% del PIB de los Estados Unidos.

Desde el Foro Económico Mundial defienden que la economía digital requiere confianza para funcionar y la identidad digital es un componente esencial de la confianza. Los líderes empresariales reconocen cada vez más que mantener la confianza a través de un enfoque claro y estratégico de la identidad satisface en gran medida sus propios intereses, ya que buscan construir y afianzar las relaciones con los clientes. Además, una colaboración más fuerte entre empresas, gobiernos y clientes fortalece la confianza, ofreciendo oportunidades de crecimiento empresarial y protecciones individuales.