El 45% de las organizaciones priorizará la sensibilización de los empleados en ciberseguridad

Con la adopción de la nube en plena expansión, las empresas se enfrentan a desafíos sin precedentes en términos de gestión de sus infraestructuras digitales y la protección de sus activos. Datos de un análisis realizado por NuuBB revela que muchos negocios están encontrando dificultades tanto en la optimización de sus recursos cloud como en la implementación de soluciones de ciberseguridad adecuadas.

Retos de ciberseguridad en 2025

Datos del mismo análisis identifican los principales desafíos que continuarán marcando la agenda de ciberseguridad en el próximo año. Entre ellos, los ciberataques dirigidos y el ransomware se destacan como las amenazas más preocupantes:

-  Ciberataques dirigidos (33%). Las organizaciones anticipan un incremento de ataques personalizados que buscan vulnerar sistemas críticos de negocio. Este tipo de ataques requieren una estrategia de defensa mucho más sofisticada y específica.

-  Ransomware y extorsiones (33%). El ransomware sigue siendo una de las amenazas más devastadoras, bloqueando sistemas y exigiendo pagos exorbitantes para su liberación. Las empresas deben estar preparadas para enfrentar no solo el secuestro de datos, sino también las crecientes extorsiones financieras que lo acompañan.

-  Fugas de datos masivas (17%). La pérdida o robo de grandes volúmenes de información sensible es otra preocupación central, con el potencial de causar daños irreparables tanto a nivel financiero como reputacional.

-  Seguridad de aplicaciones SaaS (17%). La proliferación de aplicaciones SaaS ha facilitado la agilidad empresarial, pero también ha aumentado la superficie de exposición a ataques. Blindar estas plataformas será esencial para prevenir brechas de seguridad.

De cara al próximo año, las empresas están afinando sus estrategias de ciberseguridad. Los datos revelan que, para un 45% de las organizaciones, la principal prioridad será la sensibilización de los empleados. Esta tendencia refleja la importancia de formar a los equipos en la identificación de amenazas y en el correcto uso de las herramientas digitales para minimizar los riesgos internos. Otras prioridades incluyen:

-  Contar con un aliado experto (36%). Cada vez más, las empresas reconocen la necesidad de asociarse con proveedores externos de ciberseguridad para asegurar que sus sistemas y datos estén protegidos por tecnologías y prácticas de vanguardia.

-  Blindar la infraestructura (9%) y reforzar las políticas ciber (9%). Aunque son menos mencionadas, estas áreas continúan siendo vitales. Fortalecer las defensas técnicas y ajustar las normativas internas son pasos cruciales para crear un entorno seguro en un panorama de ciberamenazas cada vez más complejo.