Un trillón anual, eso es lo que costará a las empresas el cibercrimen en los próximos años
- Actualidad
Publica Accenture un informe que a pocos deja impertérritos, sobre todo porque las cifras que se manejan están contabilizadas en trillones de dólares. Y es que la firma de investigación de mercado asegura que las empresas podrían perder hasta 5,2 trillones de dólares en los próximos cinco años en costes y pérdidas de ingresos a consecuencia de ciberataques.
Basado en una encuesta de más de 1,700 CEOs y otros altos ejecutivos en todo el mundo, el informe, Securing the Digital Economy: Reinventing the Internet for Trust, estudia las complejidades relacionadas con Internet a los que se enfrentan las empresas, señalando que la ciberdelincuencia plantea desafíos importantes que pueden amenazar “las operaciones comerciales, la innovación y el crecimiento, y la expansión a nuevos productos y servicios, que en última instancia cuestan a las empresas billones de dólares”.
Si estás interesado en el documento puedes descargarlo desde este enlace.
La industria más afectada es la tecnológica, con más de 753.000 millones de dólares en la balanza, seguida de las ciencias y automovilística, con 642.000 y 505.000 millones de dólares respectivamente.
Cuatro de cada cinco encuestados, o el 79%, creen que el avance de la economía digital se verá seriamente obstaculizada a menos que haya una mejora “dramática” de la seguridad en Internet; y más de la mitad (59%), dicen que Internet se está volviendo un lugar cada vez más inestable desde el punto d vista de la seguridad, y que no están seguros de cómo reaccionar
También recoge el informe que un 75% creen que abordar los desafíos de la ciberseguridad requiere de un esfuerzo organizado, ya que ninguna organización por sí sola puede resolver el desafío.
La creciente preocupación por la seguridad en Internet hace que más de la mitad de los encuestados, el 56%, agradezcan regulaciones comerciales más estrictas impuestas por una organización central.
Un 79% aseguran que sus empresas están adoptando nuevas tecnologías más rápido de lo que pueden asegurarlas, mientras que un 80% dicen que las amenazas generadas por terceras partes son muy difíciles de afrontar. Además, sólo un 30% de los encuestados dice estar confiado con su propia seguridad.
