CenturyLink rastreó 104 millones de objetivos exclusivos de botnets por día en 2017, incluyendo servidores, PC, dispositivos portátiles y dispositivos IoT. Los primeros cinco países objetivo de ataques por bots fueron Estados Unidos, China, Alemania, Rusia y el Reino Unido.
Los ataques de ransomware mostraron una disminución radical de detecciones en el primer trimestre, debido al cambio a los criptomineros. Comodo advierte que hay que prepararse para nuevos ataques de ransomware que se emplearán como arma de destrucción de datos.
El último Global Threat Index de Check Point revela que los hackers utilizan cada vez más malware de criptominería capaz de operar sin una sesión activa de navegador web, como la variante XMRig. Coinhive volvió a ser la principal amenaza de marzo, con un 18% de organizaciones afectadas.
Busca engañar a las víctimas para que hagan clic en extensiones de archivos desconocidas en correos electrónicos haciéndose pasar por facturas. Posteriormente se descargan archivos de script que luego actúan como cuentagotas para descargar el troyano Quant Loader.
Norteamérica y el sector retail encabezaron las brechas de datos en 2017. De acuerdo con Trustwave, la mitad de los incidentes investigados involucraron redes corporativas e internas, con el phishing y la ingeniería social como principal método de compromiso. Los ataques web dirigidos son cada vez más sofisticados.
En total se detectaron 19.954 vulnerabilidades en 1.865 aplicaciones de 259 proveedores, un 86% de las cuales tenía un parche disponible dentro de las 24 horas tras su revelación. Solo 14 de las vulnerabilidades detectadas fueron de día cero.
La variante fue utilizada para lanzar una serie de ataques DDoS contra empresas financieras. Los ataques utilizaron al menos 13.000 dispositivos IoT secuestrados que generan volúmenes de tráfico de hasta 30Gbps, bastante menos intensos que los ataques originales de Mirai de 620 Gbps.
La vulnerabilidad de los servidores Memcached será aprovechada por los ciberdelincuentes como uno de los principales vectores de ataque de 2018. Además de deshabilitar el protocolo de Memcached de cualquier servidor de red, Panda Security recomienda contar un plan de mitigación de ataques DDoS.