Predicciones para las Everywhere Enterprises en 2021

  • Opinión

Daniel Madero, MobileIron

2020 será, sin duda, el año en que la COVID-19 trastocó el mundo entero de una manera nunca vista. Como resultado, más de un tercio de la población mundial se quedó en casa, y las empresas tuvieron que revaluar su manera de operar de la noche a la mañana.

Ahora que nos acercamos a 2021, todo apunta a que los cambios que se produjeron en 2020 en nuestra vida laboral seguirán siendo la norma. Los negocios se están transformando y las empresas continúan adoptando prácticas de trabajo a distancia para adherirse a las directrices de los Gobiernos. ¿Qué les espera a las organizaciones el próximo año mientras continúan adaptándose a la era de las Everywhere Enterprises? MobileIron cree que va a haber varias tendencias claras durante los próximos doce meses.

La carrera hacia la nube continuará

La pandemia hizo que más empresas que nunca se trasladaran a la nube en busca de herramientas de colaboración y productividad para las bases de empleados que trabajan desde casa. Creemos que seguirá yendo a más a medida que cada vez más empresas se den cuenta de la importancia de la nube en 2021. Con la segunda ola en pleno apogeo, las empresas están dispuestas a preservar estos nuevos modelos de trabajo a largo plazo, algunas quizá de forma permanente; Google, por ejemplo, ha instado a sus empleados a seguir trabajando desde casa al menos hasta el próximo mes de julio.

Empleados de todo el mundo tendrán que seguir utilizando alternativas a las reuniones en persona cara a cara, y las herramientas de colaboración a distancia serán de gran ayuda. Las herramientas basadas en la nube son perfectas para este tipo de funcionalidad, y esta es una de las razones por las cuales los clientes que no están en la nube nos dicen que quieren dar el paso. Quienes ya han comenzado la transición están trasladando todavía más recursos a la infraestructura de nubes públicas.

Las personas serán el nuevo perímetro

Aunque los empleados volverán a la oficina, no lo harán a tiempo completo, y tampoco de forma masiva. De hecho, una encuesta a Everywhere Enterprises realizada por MobileIron reveló que más del 80 % de la gente no quiere volver a la oficina, nunca más.

Este cambio cerrará el círculo de una larga tendencia que ha ido en aumento desde mediados de la década de los 2000: la disolución del perímetro de la red. La red y los dispositivos que definían su perímetro serán aún menos relevantes desde el punto de vista de la ciberseguridad.

En su lugar, las personas se convertirán en el nuevo perímetro. Su identidad definirá a qué se les permite acceder, tanto dentro como fuera de la red corporativa. Incluso cuando estén conectadas a la red, tendrán un acceso mínimo a los recursos hasta que la persona en cuestión y el dispositivo que esté utilizando hayan sido autenticados y autorizados. Este modelo, conocido como redes zero trust, llegará a todos los ámbitos, abarcando no solo a los empleados, sino también a clientes, contratistas y otros socios comerciales.

La experiencia del usuario será cada vez más importante en el trabajo a distancia

Durante una pandemia es todavía más importante que los empleados estén felices y sean productivos. Especialmente porque, de media, los empleados trabajan tres horas más desde que comenzó la pandemia, hecho que pone en tela de juicio la conciliación entre vida laboral y vida personal. Está en manos de las empresas centrarse en la experiencia del usuario y hacer la vida de los trabajadores lo más fácil posible.

Cuando comenzó el confinamiento por la COVID-19, las empresas se las arreglaron expandiendo su uso de la VPN remota. Esto les ayudó a superar la crisis inmediata, pero estaba lejos de ser una solución ideal. Los dispositivos de VPN locales sufrieron una saturación de la capacidad y tuvieron problemas para escalar, lo cual creó problemas de rendimiento, y los usuarios se encontraron con un sistema de clientes de VPN e inicios de sesión enrevesado. Funcionó durante unos meses, pero, a medida que los empleados se van adaptando para seguir trabajando desde casa en 2021, los departamentos informáticos deberán centrarse en crear una mejor experiencia para el usuario remoto.

Parte de esta experiencia radica en la independencia de la ubicación. Los trabajadores deben tener movilidad, no solo poder trabajar desde sus casas. Muchas oficinas domésticas improvisadas no son adecuadas a largo plazo, y es posible que los empleados vayan a cafeterías locales o a la oficina de vez en cuando.

Los antiguos mecanismos de acceso remoto desaparecerán

Este planteamiento centrado en la experiencia del usuario cambiará la forma en que las personas acceden a los recursos informáticos. En el antiguo modelo, las empresas usaban una VPN completa para canalizar todo el tráfico a través de la red de la empresa. Esto causó problemas de latencia, especialmente al acceder a aplicaciones en la nube, porque conllevaba enrutar todo el tráfico de vuelta a través del centro de datos de la empresa.

Ya es hora de dejar de enrutar las sesiones en la nube a través de la red de la empresa. En vez de eso, las empresas deberían permitir a los trabajadores remotos acceder a ellas directamente. Esto significa sanear el tráfico en el propio dispositivo o bien en la nube. La tecnología de MobileIron permite que un dispositivo detecte en qué tipo de red se encuentra y cree una sesión cifrada con SSL directamente con la aplicación de productividad en la nube. También puede establecer políticas de acceso para dispositivos de trabajo en la nube.

Mejoras en la autenticación de usuario

Parte de este nuevo modelo de autenticación implica una mejor verificación del usuario. Para ello, tendrán que pasar dos cosas. En primer lugar, ya es hora de deshacerse de las contraseñas. La comunidad de la ciberseguridad lleva mucho tiempo defendiendo este cambio, pero la tendencia del trabajo desde casa lo acelerará. Los empleados que acceden desde dispositivos móviles utilizan cada vez más la autenticación biométrica, que es más segura y práctica.

La segunda mejora en la verificación de los usuarios será que las personas inicien sesión en las aplicaciones con menos frecuencia. Las sesiones permanecerán abiertas más tiempo, en base a un profundo conocimiento del dispositivo basado en el agente que constituirá una gran parte de la experiencia de acceso remoto.

Para cambiar las interacciones con los clientes hará falta una mejor seguridad móvil

No solo necesitarán una mejor seguridad móvil los empleados. Los negocios también cambiarán la forma en que interactúan con los clientes. Podemos estimar que habrá menos interacciones interpersonales en el comercio minorista mientras las reglas de distanciamiento social continúen. Las transacciones sin contacto, en cambio, ganarán importancia, y las empresas optarán por ofrecer opciones de caja de autoservicio. Los minoristas deben centrarse más en los dispositivos móviles para todo, desde mirar productos hasta realizar el pedido y el pago.

El aumento de los códigos QR presentará una gran amenaza

Los minoristas y otras empresas ya están empezando a utilizar, y seguirán utilizando, cada vez más los códigos QR para ofrecer una alternativa al contacto con objetos como los menús y los sistemas de pago, así como para cumplir con las normas de distancia social. Los usuarios pueden escanear estos códigos a dos metros de distancia, lo que los convierte en una herramienta perfecta para realizar pagos y proporcionar información de los productos. El problema es que nunca fueron diseñados para estas aplicaciones o para la autenticación digital, y se pueden reemplazar fácilmente por códigos malintencionados que manipulan los smartphones de manera inesperada y dañina.

MobileIron analizó estos riesgos en su informe sobre seguridad de códigos QR. Fue alarmante descubrir que el 70 % de los participantes habían escaneado un código QR en el último mes, pero la mayoría tenía un gran desconocimiento sobre cómo los códigos QR pueden afectar a la seguridad de sus móviles. Casi la mitad de los participantes declararon que no tienen, o no saben si tienen, ningún software de seguridad instalado en sus dispositivos móviles. Así pues, cabe esperar que los problemas de fraude de los códigos QR aumenten a medida que el uso de estos códigos se propague en 2021.

La era de las Everywhere Enterprises

De nuestras conversaciones con los clientes extrajimos un mensaje general muy claro: en 2020, las empresas sufrieron un cambio a largo plazo, y esto tendrá profundas repercusiones en 2021. Lo que este año empezó como una reacción apresurada durante una crisis evolucionará durante el próximo año cuando el departamento informático se una a RRHH para reconsiderar las relaciones con los empleados en la era de las Everywhere Enterprises. Si 2020 fue el año en que los negocios perdieron el equilibrio y se vieron en apuros para seguir en pie, 2021 será el año en que salgan más fuertes y erguidos, pasando de una reacción apresurada a una respuesta meditada.