Aumentan los ciberataques contra estructuras sanitarias

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Se han detectado envíos masivos de correos destinados a infectar los ordenadores, así como un virus informático muy peligroso dirigido por correo a personal sanitario llamado NetWalker. El objetivo de estos ataques es romper todo el sistema informático de los hospitales.

Los ciberdelincuentes utilizan cualquier ocasión para intentar sacar provecho, y ahora se están aprovechando de la crisis sanitaria del COVID-19 para propagar malware. Sin embargo, han ido un paso más allá atacando a centros hospitalarios. A este respecto, Sophos se hace eco de las declaraciones del inspector Alberto Francoso, responsable de la Oficina de Coordinación Cibernética, quien ha confirmado que se está investigando dos nuevos ciberataques a estructuras sanitarias.

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El pasado 23 de marzo, José Ángel González, comisario principal y director operativo de la Policía Nacional, durante la comparecencia del Comité de Gestión Técnica para la crisis del coronavirus destacó que “se han detectado envíos masivos de correos destinados a infectar los ordenadores tener acceso a todas nuestras claves, contactos e información” y, añadía que el domingo anterior se detectó un virus informático muy peligroso dirigido por correo a personal sanitario llamado NetWalker. Según el comisario, estos ataques “pretenden romper todo el sistema informático de los hospitales. Por lo tanto, les decimos que tengan cuidado a la hora de abrir estos correos electrónicos de procedencia desconocida”.

El Centro Nacional de Protección de Infraestructuras y Ciberseguridad (CNPIC) tuvo constancia de una de estas posibles intrusiones por la aparición de una imagen en la red con información presuntamente confidencial. “Quizá era un hacker que buscaba publicidad”.

Asimismo, a principios de marzo, un grupo de “ciberatacantes de elite” intentó acceder a la Organización Mundial de la Salud, según reveló Reuters. Los motivos no están claros y no tuvieron éxito, pero el encargado de ciberseguridad del organismo advirtió que los intentos de hackeo estaban creciendo. El supuesto fin era robar contraseñas del correo de funcionarios de la OMS.

Pese que estos ataques han tenido pocas consecuencias reales, Sophos recuerda que hay que estar en alerta.