60 estafadores de e-commerce detenidos en una operación internacional

  • Actualidad

Una operación conjunta de las fuerzas de seguridad de 19 países, coordinadas por la Interpol, ha llevado a la detención de 60 personas sospechosas de fraude en comercio electrónico.

Interpol ha informado de que han sido detenidas 60 personas sospechosas de fraude en comercio electrónico como resultado de una operación conjunta apoyada por 19 países y coordinada por su Centro de Cibercrimen Europeo (EC3). En ella también han participado empresas del sector privado. El objetivo de esta operación, denominada eComm2019, fue atacar redes de delincuentes sospechosas de fraude online a través  de acciones coordinadas en la UE, según explica en un comunicado.

En este tipo de delitos se incluyen transacciones ilegales o falsas realizadas en plataformas, aplicaciones y servicios online: los estafadores simplemente utilizan información de tarjetas robadas para comprar productos en tiendas web. Los sospechosos arrestados durante la operación, que se llevó a cabo del 23 de septiembre al 4 de octubre de 2019, fueron responsables de casi 6.500 transacciones fraudulentas con tarjetas de crédito comprometidas.

El valor estimado de estas operaciones es de más de 5 millones de euros y, además, las fuerzas de seguridad registraron en esos días más 40 casas y evitaron pérdidas por valor de 93.000 millones.

Europol apoyó a las autoridades nacionales competentes durante las operaciones en sus respectivos países ofreciendo su apoyo en análisis e intercambio de información. Además, también colaboraron bancos, plataformas de servicios de tarjetas de pago, retailers europeos y empresas de logística. De acuerdo con sus explicaciones, el sector privado cooperó con las autoridades policiales nacionales informando sobre actividades fraudulentas y “esta colaboración entre la policía y el sector privado ha demostrado ser beneficiosa y ha llevado al desarrollo de mejores prácticas”, añadió.

La investigación reveló que los estafadores individuales están conectados con grupos del crimen organizado y han estado involucrados en otros tipos de delito, como phishing, ataques de malware, uso de pasaportes robados, lavado de dinero, creación de sitios web falsos y uso de plataformas de redes sociales para llevar a cabo el fraude.