Los delitos relacionados con las criptomonedas se diversifican y profesionalizan

Chainalysis ha publicado un avance de su Crypto Crime Report, el informe que recopila toda la actividad ilícita que se ha realizado en el 2024 con criptomonedas. Este informe demuestra que las direcciones ilícitas recibieron 40.900 millones de dólares en 2024, una cifra que incluso puede alcanzar los 51.000 millones de dólares a medida que se continúan realizando nuevos análisis.

El uso global de criptomonedas ha aumentado, y también lo han hecho de la misma forma los delitos con cripto activos. Aunque 2024 ha sido un año prolífico en delitos, estos son sólo una pequeña parte del ecosistema cripto, ya que representa sólo el 0,14% del valor total de las transacciones.

Durante 2021, Bitcoin fue la criptomoneda preferida para estos fines, debido a su alta liquidez. Desde entonces se ha observado una diversificación constante que se aleja del Bitcoin, y las monedas estables ahora ocupan la mayoría del volumen de transacciones ilícitas (un 63% de todas las transacciones ilícitas). Esta nueva realidad es parte de una tendencia más amplia del ecosistema, donde las monedas estables ocupan un volumen considerable de toda la actividad criptográfica, como lo demuestra el crecimiento interanual total de la actividad de las monedas estables (en torno al 77%).

Sin embargo, el aspecto más preocupante es la continua diversificación y profesionalización de los delitos relacionados con las criptomonedas. Eric Jardine, director de investigación de delitos cibernéticos en Chainalysis, asegura que “cada vez más actores ilícitos -como los grupos de delincuencia organizada transnacional- están usando las criptomonedas para llevar a cabo una variedad de actividades delictivas tradicionales, como el tráfico de drogas, los juegos de azar, el robo de propiedad intelectual, el lavado de dinero, el tráfico de personas y animales o los delitos con violencia”. “En particular, algunas redes delictivas están recurriendo a las criptomonedas para participar en múltiples formas de actividad delictiva”, concluye Jardine.

Esta tendencia se evidencia en que, de los 40.900 millones de dólares recibidos por direcciones ilícitas en 2024, 10.800 millones de dólares pueden atribuirse a “organizaciones de actores ilícitos”. Esta categoría denomina las billeteras vinculadas a los individuos y grupos directamente involucrados en delitos cibernéticos, como el hackeo, la extorsión, el tráfico de drogas y las estafas; así como la infraestructura, las herramientas y los servicios que les rodean, como el lavado de dinero.