El gasto en ciberseguridad acapara ya una cuarta parte de los presupuestos tecnológicos
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El gasto en seguridad es cada vez mayor y llega a suponer el 26% de los presupuestos tecnológicos de las compañías. Esto se debe a la necesidad de blindar los procesos de transformación digital, pero también a que el coste de los incidentes está aumentando de forma escandalosa.
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Con el coste de los incidentes en aumento, las empresas se están dando cuenta de que deben priorizar el gasto en ciberseguridad para que los proyectos de transformación digital funcionen sin problemas y de forma segura, según un reciente estudio que acaba de hacer público Kaspersky Lab.
En este documento, la firma calcula que las grandes empresas dedicarán casi un tercio de su presupuesto TI (7,5 millones de euros) a la ciberseguridad en 2018 y también que se está produciendo un aumento del gasto dedicado a este concepto por parte de las más pequeñas (hasta 10 empleados): en los últimos doce meses su presupuesto ha pasado desde los 2.000 euros hasta los 3.300 euros anuales.
Y no es de extrañar porque, según los datos de Kaspersky Lab, los costes de las brechas de seguridad están aumentando mucho. En concreto, para las pymes, el coste medio alcanzó los 102.000 euros, que es un 36% superior a la cifra de 2017. Para las empresas grandes, el aumento fue del 24%, lo que sitúa esa cifra en 1,05 millones de euros.
Estos costes son una preocupación para las empresas inmersas en la transformación digital actual y para las que la infraestructura cloud adquiere una importancia cada vez mayor. “Una de las razones clave detrás de esta inversión adicional en seguridad TI es la mayor complejidad de la infraestructura de TI, a medida que las empresas adoptan plataformas cloud con más frecuencia, junto con el propósito de ayudar a mejorar el nivel de experiencia en seguridad especializada”, concluye el estudio.
Dos de cada tres de los incidentes de ciberseguridad más costosos que afectan a PYMES están relacionados con la nube, donde un problema con la infraestructura de TI alojada en terceros llega a alcanzar un coste medio de 150.000 euros. Para las empresas grandes, la protección de datos sigue siendo la principal prioridad, con un coste medio de hasta 1,4 millones de euros en las brechas de seguridad de datos, y de 1,2 millones de euros en el caso de incidentes que afectan a la infraestructura TI de terceros.