El sector energético tiene un "compromiso real y en ejecución" con la securización, según un informe

  • Infraestructuras críticas

En su tránsito desde un estado incipiente de transformación digital a uno más maduro, las empresas del sector energético español son conscientes de las exigencias en materia de seguridad para proteger sus activos críticos. Un estudio de Minsait subraya que "en el sector energético español ya existe un compromiso real y en ejecución hacia la securización". Vemos qué dice sobre esta cuestión y cómo está siendo la evolución hacia lo digital de estas compañías.

También puedes leer...

Cómo evaluar las opciones de SD-WAN

La Seguridad es Infinity

Gestión de cuentas con privilegios para Dummies

Cómo combatir las amenazas cifradas

Cómo vencer al malware evasivo

La ‘ambición por lo digital’ de las compañías energéticas viene empujada por la presión de los operadores entrantes y por cómo están afectando a la cadena de valor los cambios tecnológicos, según el último Informe sobre Madurez Digital de Minsait. Sea por lo que sea, la transformación de este sector en España está ganando profundidad, y cuatro de cada cinco empresas energéticas está impulsando ya este proceso con formación interna y con la incorporación de nuevos perfiles digitales.

El informe de Minsait sostiene que el sector de las utilities se encuentra en una tendencia de viraje de su modelo tradicional, al incorporar en su propuesta de valor un impulso al proceso de digitalización y la diferenciación con nuevos servicios digitales dirigidos al cliente final, al tiempo que continúa gestionando su compleja red de infraestructuras. “Las energéticas parecen haber entendido el valor de la tecnología para lograr esta transformación y convertirla en una ventaja competitiva que ayude a hacer más eficientes las operaciones y ofrecer nuevos servicios a sus clientes. Además, una creciente presión de competencia y regulación aumenta su necesidad de diferenciarse de los competidores y elevar los márgenes comerciales”, subraya. 

El documento explica que, ante el reconocimiento de la necesidad de evolucionar el modelo, ya hay iniciativas encaminadas a aprovechar las posibilidades que ofrecen la personalización de la oferta mediante el análisis de big data, una oferta de servicios de eficiencia  energética y autoconsumo a través de Internet de las Cosas, así como la automatización de las operaciones para ser más eficientes. Cita también que “los acuerdos con proveedores tecnológicos innovadores podrían ayudar a la gran corporación energética española a posicionarse en el diseño de nuevos mercados a través de tecnologías como blockchain”.

En el esfuerzo transformador, según este trabajo, también están poniendo medios para lleva a cabo la transformación cultural necesaria, cuestión que preocupa. Las utilities coinciden en que es preciso reconvertir el talento interno a través de planes de formación específicos e incorporación de nuevos perfiles digitales. “Esta creencia pone de relieve el interés por fomentar una cultura orientada a la innovación, plasmada en los ya activos centros y programas de innovación internos”, dice el informe.

Por otro lado, también están considerando la introducción de tecnologías inteligencia artificial, análisis de datos o robótica para aumentar la automatización de las operaciones, al tiempo que ponen en marcha estrategias de mejora de la experiencia del cliente.

Concienciación sobre seguridad
Muchos de los activos del sector eléctrico son infraestructuras críticas y las energéticas españolas son conscientes de que se derivan de ellas altas necesidades de seguridad. Por ello, el sector da relevancia a esta cuestión en todas sus operaciones y en particular la securización de estas infraestructuras que le dan soporte. Para ello, se hace necesaria una mayor sensorización y la adopción de tecnología para operar estos activos.

“En el sector energético español ya existe un compromiso real y en ejecución hacia la securización, de modo que menos de un 10% de las empresas del sector carece de planes de contingencia o pólizas de ciberseguridad. Para ello, está siendo necesaria una inversión importante en recursos, tanto por parte de los players como del operador del sistema y del propio mercado”, concluye el informe.