Siete de cada diez empresas, convencidas de que la inteligencia artificial es clave en ciberprotección

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El 69% de las empresas cree que no será capaz de responder a las amenazas de ciberseguridad sin la inteligencia artificial, según los datos de un nuevo estudio del Instituto de Investigación de Capgemini. Por tanto, no es de extrañar que, en la misma proporción, tengan planes de implantar esta tecnología para reforzar este ámbito.

Que las empresas se sienten desbordadas ante las múltiples amenazas que acechan a sus sistemas es una realidad palpable y esta preocupación viene acompañada del aumento constante de sus partidas presupuestarias destinadas a la seguridad.

El informe lo expresa diciendo que “con un número en aumento de dispositivos para usuarios finales, redes e interfaces de usuario como resultado de los avances en la nube, el Internet de las Cosas (IoT), la 5G y las tecnologías de interfaz conversacional, las organizaciones se enfrentan a la urgente necesidad de ampliar y mejorar continuamente su sistema de ciberseguridad”.

La aplicación de tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial (IA), a este campo aumenta las posibilidades de ciberdefensa y así lo constata un nuevo estudio de Capgemini, cuyos resultados evidencian la confianza en este tipo de soluciones. Por ejemplo, un 69% de las compañías reconocen que no podrán responder a las amenazas críticas sin la IA y, en consecuencia, piensan implantar la tecnología para reforzar sus sistemas de defensa.

En sus conclusiones, el informe sostiene que la ciberseguridad basada en IA es hoy imprescindible para hacer frente a un panorama en el que “el 56% de los directivos afirma que sus analistas de ciberseguridad se ven desbordados por el inmenso volumen de unidades de información que deben vigilar para detectar y prevenir intrusiones”.

Además, el tipo de ciberataques que requieren una intervención inmediata o que no pueden ser solucionados con rapidez suficiente por los analistas ha crecido considerablemente. En este punto, menciona dos ejemplos concretos: por un lado, han aumentado las incidencias que afectan a las aplicaciones sujetas a exigencias temporales y, por otro, los ataques automatizados, que se producen a velocidades que sólo una máquina puede alcanzar, que mutan a un ritmo que no puede ser neutralizado mediante sistemas de respuesta tradicionales.

En este punto, a inteligencia artificial no solo es vista como un revulsivo para aumentar la ciberprotección y la capacidad de respuesta, sino que el 61% de los directivos piensa que es necesaria para identificar las amenazas críticas.

Para realizar el estudio, titulado Reinventing Cybersecurity with Artificial Intelligence: the new frontier in digital security", se entrevistó a 850 ejecutivos de alta dirección de las áreas TIC "de seguridad y operaciones de empresas de siete sectores y en diez países, incluido España. También se realizaron entrevistas en profundidad con expertos del sector, startups de ciberseguridad y representantes del mundo académico.