
El número medio de proveedores de nube pública por organización ha aumentado a 2,1, y la mayoría también mantiene una infraestructura local. El 55% de las empresas afirma que la nube es más difícil de proteger que la infraestructura local, lo que supone un aumento de 4 puntos porcentuales con respecto a 2024.
El uso de la IA es cada vez más frecuente en el lugar de trabajo, por lo que regular su uso es una buena práctica. Sin embargo, ni siquiera un tercio de las organizaciones cuentan con una política formal e integral de IA, lo que pone de manifiesto una disparidad entre la frecuencia de uso la IA y el grado de regulación.
Las redes sociales se han convertido en terreno fértil para el uso malicioso de inteligencia artificial generativa para crear contenidos falsificados o deepfakes. Falsos candidatos, CEO suplantados y audios manipulados, son algunos de los intentos de fraude más habituales.
A medida que los modelos de inteligencia artificial generativa van avanzando en su capacidad para detectar las ciberamenazas, los ciberdelincuentes van explorando técnicas como la inyección de promt para intentar modificar el comportamiento de la IA que utilizan los defensores.