Kaspersky Lab denuncia a Microsoft por abuso de posición dominante ante la UE
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Kaspersky Lab denuncia el abuso de posición dominante en el mercado de software de antivirus de Microsoft, una demanda que la compañía rusa ya había presentado a finales de 2016 ante el Servicio Federal Antimonopolio de Rusia (FAS).
Kaspersky Lab ha demandado a Microsoft ante la Comisión Europea. Así lo ha hecho saber la firma rusa en un comunicado disponible en su página Web en el que acusa a Microsoft de utilizar su posición dominante con Windows para favorecer su propio software antivirus en detrimento de los de la competencia con Windows 10.
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De esta forma, Kaspersky Lab solicita a la Comisión Europea y a las autoridades de competencia de Alemania que investiguen las actuaciones de Microsoft en relación “con el cumplimento de los respectivos artículos de la legislación antimonopolio en relación con el abuso de su posición dominante en el mercado de sistemas operativos informáticos y la competencia desleal en el mercado de soluciones de protección contra las ciberamenazas”.
Kaspersky Lab asegura que, con el lanzamiento de Windows 10, Microsoft comenzó a crear obstáculos para los fabricantes de soluciones de seguridad de la competencia e introdujo diferentes vías para hacer que los usuarios no utilizasen software de terceros y se decantasen por Windows Defender.
“Estas acciones de Microsoft generan un menor nivel de protección para los usuarios, una limitación a su derecho a elegir y pérdidas financieras tanto para los usuarios como para los fabricantes de seguridad”, destaca el comunicado de Kaspersky.
En un blog, Eugene Kaspersky, fundador y CEO de Kaspersky Lab, asegura que “Microsoft utiliza su posición dominante en el mercado de los sistemas operativos para promover ferozmente su propio software de seguridad (Windows Defender), que es inferior, a expensas de la solución previamente elegida por los usuarios”.
Aunque Eugene Kaspersky confirma que Microsoft ha realizado algunos cambios, tras la denuncia presentada a finales de 2016 ante el Servicio Federal Antimonopolio de Rusia (FAS), y reconoce que “ésta es la dirección correcta”, cree que esto no es suficiente. “En consecuencia, llevamos a cabo nuestra lucha por proteger los intereses tanto de los usuarios como de la industria AV”.
