El 86% de los problemas de seguridad de los dispositivos IoT son calificados como críticos

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Las soluciones de Internet de las Cosas ya son realidad tanto en el ámbito corporativo como en el doméstico y, en entornos cada vez más conectados, es necesario prestar atención a la ciberseguridad. Un estudio revela que el 86% de los problemas de seguridad que afectan a dispositivos IoT son clasificados como críticos.

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Cada día hay más dispositivos conectados y tanto empresas como consumidores están familiarizados con Internet de las Cosas a medida que el mundo se ha ido digitalizando y nos movemos en entornos cada vez más interconectados. Sin duda, IoT va a seguir avanzando y esto exige una reflexión sobre cómo gestionar un mundo conectado, que tiene muchas implicaciones de seguridad.

Sobre los retos de seguridad que plantea IoT ha profundizado una investigación de la compañía RiskRecon, llevada a cabo junto con Cyentia Institute. En ella han tratado de ver cómo afectan los dispositivos IoT expuestos a la superficie de riesgo de las empresas mediante la revisión de un conjunto de datasets compuesto por millones de hosts controlados por más 35.000 empresas.

Entre las conclusiones de este informe destacan que el 86% de los problemas de seguridad detectados en los dispositivos IoT se consideran críticos y, además, cuantos más dispositivos expuestos hay, más problemas de seguridad suele tener una empresa. Es decir, los autores sostienen que si la seguridad de los despliegues IoT no está bien cubierta, habrá más probabilidades de tener otro tipo de problemas relacionados, por ejemplo, con el filtrado de red o la aplicación de parches de software.

El informe llama la atención sobre las cámaras o las impresoras como objetos que habitualmente están conectados a Internet dentro de una infraestructura empresarial, y subraya que el software IoT que utilizan estos dispositivos carecen en muchas ocasiones de la seguridad necesaria para evitar posibles fallos. Otra de sus conclusiones es que las instituciones de educación superior tienen una tasa 14 veces mayor de exposición de los dispositivos de IoT que la media de otros sectores.

Según el documento, “estos problemas se agravan porque los problemas de seguridad de estos dispositivos se resuelven más tarde que en otro software. Si añadimos a esto la incapacidad de parchear fácilmente software vulnerable y un soporte inferior a otros productos, es evidente que cualquier evaluación del riesgo de seguridad de una empresa debe contener una evaluación de los dispositivos IoT".