El trabajo a distancia: reto y oportunidad para la seguridad de las empresas

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Dos estudios de Cisco revelan datos que evidencian que la seguridad y la privacidad son un reto para las empresas ante el aumento del teletrabajo. La transición acelerada a entornos de trabajo híbridos, que combinan el trabajo a distancia con el presencial, también es una oportunidad para que refuercen el acceso seguro a las aplicaciones y la protección de los datos.

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El primero de ellos, “Future of Secure Remote Work” muestra cómo la mayoría de organizaciones de todo el mundo estaban poco preparadas para tener a tantos empleados trabajando a distancia, por lo que tuvieron que adoptar soluciones para conseguir entornos más seguros.

Aún así, el 61% han sufrido un incremento de ciberataques superior al 25% desde el inicio de la pandemia, y casi todas (el 96%) han tenido que adaptar sus políticas de seguridad. La situación ha servido para que el 85% de las organizaciones consideran la ciber-seguridad extremadamente importante o más importante que antes de la pandemia, y el 66% creen aumentará la inversión en ciberseguridad.

El acceso seguro es el principal reto para el trabajo remoto para el 62% de los consultados, seguido por la privacidad de datos (55%) y el control y reforzamiento de las políticas (50%).

El segundo de los documentos, el Consumer Privacy Survey, analiza las preocupaciones de trabajadores y consumidores sobre la privacidad de las herramientas de teletrabajo, y entre sus conclusiones destaca que son escépticos al preguntarles si las empresas hacen todo lo necesario para mantener sus datos seguros. Sin embargo, demandan pocos cambios en los requisitos de privacidad, aunque sí mayor transparencia de las empresas en la forma de utilizar los datos de clientes y empleados.

La oportunidad
Según explica Jeetu Patel, vicepresidente senior y director general de Seguridad y Aplicaciones en Cisco, la situación ha colocado a la seguridad y la privacidad “entre las cuestiones sociales y económicas más importantes de nuestro tiempo”. A su juicio, ante el nuevo modelo de trabajo híbrido, hay una oportunidad única de transformar la manera en que abordamos la seguridad para satisfacer mejor las necesidades de organizaciones y usuarios finales”.