Buenas prácticas para iniciar el año con ciberseguridad
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Comprobar la seguridad del móvil y ordenador, y, en caso necesario, adaptarla a los nuevos tiempos, debería estar entre los buenos propósitos del año. Ello pasa por instalar una solución de seguridad, actualizar los equipos y realizar copias de seguridad, entre otras prácticas.
Desde el inicio del nuevo año, los cibercriminales ya han puesto en circulación varias decenas de miles de nuevas amenazas, incluido ransomware y troyanos bancarios. Para ponérselo lo más difícil posible a los cibercriminales, hay una serie de buenas prácticas deberíamos poner en marcha a fin de mejorar la seguridad de aquellos dispositivos que nos acompañarán durante este 2018. Como explica Eddy Willems, experto en ciber seguridad en G Data Software, “comprobar la seguridad de tu móvil y ordenador, y, en caso necesario, adaptarla a los nuevos tiempos, debería estar entre los buenos propósitos del año. De lo contrario, nos convertiremos en víctimas fáciles del cibercrimen y veremos comprometida los contactos, las fotos y cualquier otra información personal almacenada en nuestros dispositivos”. La compañía aconseja seis prácticas para empezar el año con la máxima seguridad:
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- Instalar una solución de seguridad en PC, Mac y dispositivos móviles. Se recomienda apostar por aquellos fabricantes de soluciones de seguridad que almacenan, procesan y protegen los datos de sus clientes en territorio europeo y, en consecuencia, sometidos a leyes de protección de datos europeas.
- Actualizar los equipos, incluyendo sistema operativo, navegador y el resto de programas instalados en cualquiera de los dispositivos. Todos ellos deberían tener instalados los parches y actualizaciones disponibles, mientras que los programas obsoletos, sin actualizaciones de seguridad, deberían desinstalarse o reemplazarse por versiones modernas o similares.
- Borrar cuentas online de usuario innecesarias de redes sociales, correo electrónico, tiendas online, proveedores de pago, etc. Estas cuentas en desuso constituyen una puerta de acceso a los datos personales de la que en ocasiones ni siquiera tenemos constancia. Para minimizar la posibilidad de robo lo mejor es que, de vez en cuando, se eliminen todas aquellas que ya no se van a usar.
- Emplear contraseñas fuertes y diferentes para cada equipo o servicio. Hay soluciones de seguridad que incluyen un administrador de contraseñas que automatiza este proceso.
- Realizar copias de seguridad periódicas de los archivos sensibles almacenados en todos los dispositivos.
- Descargar apps solo de fuentes seguras. Evita descargas fuera de Google Play, App Store o los mercados de los fabricantes de los terminales. Además, es recomendable revisar los permisos de las apps.
