La potencial amenaza de los chatbots para los menores de edad

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MyAI

Kaspersky avisa del peligro inherente de los chatbots para los niños, particularmente los respaldados por potentes motores de IA, que pueden generar respuestas falsas o inadecuadas para menores, además de la posible pérdida de la privacidad de los datos.

Kaspersky ha avisado del peligro que puede suponer el uso de los chatbots para los menores sin el control de sus progenitores. Para ponernos en situación, la compañía se centra en el chatbot MyAI de la aplicación Snapchat, que pueden utilizar niños de hasta 13 años sin consentimiento paterno. Para empezar, la app recopila datos como nombre, dirección e email y número de teléfono y los comparte con terceros según sus políticas de privacidad.

La percepción de los menores respecto a lo que les dice la IA es de considerable confianza, cuando la propia app reconoce que puede ofrecer “contenido sesgado, incorrecto, dañino o engañoso”. Kaspersky cita el caso de un reportero del Washington Post, que se hizo pasar por un adolescente y pidió consejos para celebrar una fiesta memorable. Entre otras cosas, la IA le explicó cómo disimular el olor a alcohol y marihuana.

La propia Kaspersky puso a prueba a MyAI y pudo obtener respuestas de tipo sexual sin verificación de edad. La compañía señala también que los chatbots diseñados con fines eróticos son también de fácil acceso dado que basta con que los niños mientan sobre su edad para que puedan acceder a ellos. En todo caso, Noura Afaneh, analista de contenido web de la compañía, señala que “prohibir no es la mejor opción. Siempre hay algo en Internet a lo que van a estar expuestos. Es esencial fomentar la educación a la hora de navegar por la red y trabajar con los menores para mitigar los riesgos”.

Es uno de los principales consejos de la compañía, que indica la importancia de enseñar a los niños los conceptos básicos de seguridad y privacidad online, además de explicarles que deben pedir ayuda para configurar los ajustes de privacidad. También se recomienda involucrarse en las actividades online de los pequeños para enseñarles buenos hábitos, así como utilizar soluciones de seguridad integral y aplicaciones específicas para facilitar la educación digital.