Alemania acusa a Rusia de intentar influir en las elecciones mientras reconoce el uso de Pegasus

  • Actualidad

Pegasus, un spyware que puede encender la cámara o el micrófono de un teléfono y recopilar sus datos, acumula entre sus objetivos a centenares de políticos, periodistas y activistas a favor de los derechos humanos

Recomendados: 

Entendiendo la Era del dato: tecnologías y propuestas para gestionar la "datificación" Webinar 

Gestión de riesgos para la mejora de los planes de continuidad de negocio Leer

Identificación de ataques web Leer

Alemania ha protestado formalmente ante Rusia por los intentos de robar datos de los legisladores en lo que sospecha que puede haber sido una preparación para difundir desinformación antes de las próximas elecciones alemanas.

En declaraciones recogidas por la agencia de noticias AP, Andrea Sasse, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Alemania, ha dicho que un grupo de ciberdelincuentes conocidos como Ghostwriter ha estado “combinando ciberataques convencionales con operaciones de desinformación e influencia”, y que se han observado actividades dirigidas a Alemania “durante algún tiempo”.

Se asegura también que el grupo ha lanzado intentos de ataques de suplantación de identidad mediante correo electrónico para hacerse con los datos personales de inicio de sesión de los legisladores federales y estatales para realizar operaciones de influencia y campañas de desinformación relacionadas con las elecciones parlamentarias.

Andrea Sasse dijo que se ha pedido al gobierno ruso que “ponga fin a dicha actividad de inmediato”, y que se ha hecho esa demanda directamente a los funcionarios rusos durante una reunión celebrada la semana pasada con de un grupo de trabajo germano-ruso sobre política de seguridad, en la que el viceministro de Relaciones Exteriores alemán Miguel Berger planteó el tema al viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia.

Pegasus

Por otra parte, el gobierno alemán admitió ayer que la policía federal ha utilizado Pegasus, un controvertido software espía desarrollado por NSO Group

Pegasus, que puede encender la cámara o el micrófono de un teléfono y recopilar sus datos, fue objeto de escrutinio mundial después de que el pasado mes de julio se filtrara una lista de unos 50.000 posibles objetivos de vigilancia, incluidos periodistas, activistas y políticos.

La decisión de comprar el software espía de fabricación israelí se habría tomado después de que la Oficina Federal de Policía Criminal, conocida en Alemania como Bundeskriminalamt, o BKA, no lograra desarrollar su propio software espía. Se firmó un acuerdo con NSO en 2019.