Las mejoras en seguridad y resiliencia impulsan la adopción de redes móviles privadas 5G

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Según un estudio de Spirent Communications, la seguridad y la capacidad de recuperación de la red son los factores clave que motivan a las empresas a considerar las redes privadas, y son claros impulsores de un mercado que podría alcanzar los 7.700 millones de dólares en 2027.

Según esta encuesta, que trata de identificar los retos y impulsores técnicos y comerciales de las redes privadas a la hora de crear valor, estas están "están emergiendo como una alternativa viable a las redes empresariales tradicionales, ofreciendo una amplia gama de beneficios", pero el ecosistema desagregado de las redes privadas, la amplia gama de dominios, tecnologías y diversidad de casos de uso dan como resultado una complejidad mucho mayor que las redes WAN o de área amplia, en las que las empresas llevan confiando mucho tiempo.

Hay varias áreas que son críticas para que el mercado crezca hasta los 7.700 millones de dólares que se le calcula en 2027. Por una parte, la gestión del nivel de servicio, que el análisis de Spirent Communications tilda de "especialmente crítica" porque las redes privadas impactan directamente en los resultados de negocio, que se ven afectados por el rendimiento de la red y el cumplimiento de los SLA o acuerdos de nivel de servicio.

Además, el estudio revela que que la seguridad y la capacidad de recuperación de la red son los factores clave que motivan a las empresas a considerar su adopción. Son requisitos imprescindibles para habilitar caso de uso de misión crítica y frenar las preocupaciones en torno a la soberanía de los datos.

Como tendencias, el documento menciona la automatización y las pruebas continuas en todo el ciclo de vida, desde el diseño de la red, para poder desplegar y gestionar diversas redes privadas, y para reducir los costes operativos. Además, sostiene que las empresas parecen dispuestas a pagar una prima por un aumento de los requisitos de nivel de servicio.

Asimismo, destaca las oportunidades que se abren para los integradores de sistemas globales y los proveedores de servicios en nube. Los primeros por su capacidad para hacer frente a la complejidad de los entornos y los casos de uso, y los segundos por las relaciones que mantienen con los compradores de TI.

Por último, destaca que las compañías intentan pasar de los modelos CAPEX a los OPEX, ya que las redes privadas suelen financiarse con presupuestos de TI. Muchas de ellas están a favor de modelos como servicio basados en el consumo.