La biometría dará un salto cuantitativo al aplicar la tecnología al control de fronteras

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En 2025 los ingresos procedentes de la aplicación de la biometría al control de fronteras alcanzarán los 3.500 millones de dólares, según un estudio de ABI Research. La necesidad de mayores niveles de seguridad, autenticación y velocidad de procesamiento de los datos de los pasajeros en los controles fronterizos, van a favorecer el crecimiento de la biometría en este campo.

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La necesidad de mayores niveles de seguridad, autenticación y velocidad de procesamiento de los datos de los pasajeros en los controles fronterizos, hace que aumente la inversión en soluciones de gestión de identidades y, concretamente, supone un gran mercado para los proveedores de biometría. Así lo constata ABI Research en un informe en el que dice que los ingresos que se generarán por quioscos biométricos, puertas electrónicas, cámaras de vigilancia y dispositivos de reconocimiento facial, iris o huella digital supondrán una oportunidad para los proveedores de 3.500 millones de dólares en 2025.

Según el analista de la firma, Dimitrios Pavlakis, estas tecnologías no solo traen un amplio espectro de estrategias de monetización para los integradores de servicios, sino que suponen nuevos retos.

Las autoridades de control de fronteras están realizando fuertes inversiones en autenticación biométricamente mejorada y en medidas de seguridad, con las que están aumentando el retorno de la inversión (ROI) y están ayudando a desarrollar estrategias de monetización más precisas, que permiten agilizar la gestión de identidad y el flujo de pasajeros, disminuir el tiempo de procesamiento, automatizar la autenticación de pasajeros, mejorar la experiencia general y desarrollar nuevas plataformas y servicios interoperables.

Sin embargo, como explica Pavlakis, “esto se basa en el supuesto de que se implementarán nuevas inversiones en infraestructura para la administración del Control Automatizado de Fronteras (ABC), nuevos dispositivos y servicios de software. ABC depende en gran medida de las puertas biométricas biométricas y los quioscos de autoservicio de registro de pasajeros que utilizan reconocimiento facial, de huellas digitales y de iris”. También han llegado a este ámbito nuevos dispositivos de hardware biométrico como dispositivos de mano, add-ons de dispositivos de identificación/autenticación de inmigración, control de acceso y gestión de la fuerza laboral.

Todo esto hay que integrarlo y, además, estamos en un momento en el que los gobiernos y las fuerzas de seguridad colaboran cada vez más entre ellos y con organismos internacionales, por lo que se necesitan plataformas interoperables.

Los proveedores de tecnología biométrica y los integradores de servicios deben ser capaces de entender todos los requisitos a lo largo de la cadena de valor. En este punto, ABI menciona que empresas como Gemalto (Thales Group), IDEMIA, Collins Airspace, Gunnebo, Vision Box, Dermalog, HID Global y Aware están muy especializadas en esta tecnología y están innovando en soluciones y tecnologías (desde e-gates, quioscos, opciones de hardware de reconocimiento de rostro, huella digital e iris, autenticación para la gestión de pasajeros, a soluciones biométricas móviles, sistemas de intercambio de datos entre agencias y plataformas de servicios interoperables).