Las empresas gastarán más en seguridad en 2018 y optarán por eliminar la complejidad

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El gasto en hardware, software y servicios de seguridad alcanzará los 91.400 millones de dólares este año, según los últimos datos de IDC sobre el tema. En su estudio, la firma constata que las empresas se preparan para lidiar con la complejidad apostando por proveedores que dispongan de una plataforma integrada.

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Si se compara con las cifras del año pasado, el gasto mundial en seguridad crecerá un 10,2%, un buen ritmo que IDC dice que se mantendrá al menos hasta 2021, año en el que concluye su estudio. El gasto se situará en ese momento en los 120.700 millones de dólares. Por supuesto, el motivo es obvio: todas las empresas están invirtiendo en este ámbito para hacer frente a la gran cantidad y variedad de amenazas.

En 2018, para evitar ciberataques a gran escala y cumplir con las normativas, serán los bancos los que más gasten en seguridad, seguidos de las empresas de fabricación discreta y administraciones. En conjunto, invertirán 27.000 millones de dólares. Otros cuatro sectores, fabricación de procesos, servicios profesionales, consumo y telecomunicaciones, gastarán cada uno algo más de 5.000 millones.

La firma apunta en su estudio que en las empresas de telecomunicaciones y el sector público, incluyendo educación, además de los bancos y las de recursos, será donde el gasto crezca a mayores ritmos. Lo hará a ritmos superiores al 11% en todos estos sectores.

Por categorías, serán los servicios de seguridad en los que se vea un mayor incremento de las partidas presupuestarias, situándose este mismo año en 18.000 millones de dólares. Por detrás están el hardware de seguridad, los servicios de integración y el software de seguridad del endpoint.

En cuanto al gasto por geografías, el país que más dinero destinará a esta materia será Estados Unidos, a la cabeza con cerca de 38.000 millones de dólares anuales, seguido de Reino Unido, con 6.500 millones; China, 6.000 millones; Japón con 5.100, y Alemania con 4.600.

Reducir la complejidad
Un estudio de Cisco en el que han participado 3.600 responsables de seguridad, pone de relieve que las empresas están reduciendo su capacidad de ciberdefensa al crear entornos de protección cada vez más complejos, con soluciones de múltiples proveedores, para protegerse de un escenario de amenazas muy sofisticado.

Precisamente, según IDC, el 30% del gasto en 2020 se producirá en proveedores que cuentan con un enfoque con una plataforma integrada. El cambio vendrá en parte por el presupuesto, pero principalmente porque las empresas han toma conciencia de la complejidad para gestionar estos entornos de muchos proveedores.

Como explica Sean Pike, su vicepresidente de los programas de productos de seguridad y legal, riesgos y cumplimiento, “reducir la complejidad optando por plataformas integradas, tanto on-premise o cloud, ofrece el potenciar de mejorar la seguridad, ya que las compañías consiguen ventajas en automatización y simplificación de la gestión”.